Sufrimiento de los samarios
En Santa Marta la felicidad no es completa, a pesar de que tiene uno de los macizos montañosos más altos del mundo, la ciudad sufre a causa del desabastecimiento de agua potable.

Esto ocurre en la mayoría de barrios, pero sobre todo en Olaya Herrera, ubicado al norte de la capital del Departamento del Magdalena. Edgar Pimienta habitante del sector y miembro de la junta de acción comunal, en entrevista para VOCES 89.4 F.M., se mostró inconforme con la prestación del servicio de agua, y dijo que, “a pesar de ser privilegiados por una inmensa fuente hídrica, productora de más de mil millones de metros cúbicos por año. Entonces, ¿qué es lo que realmente pasa, por qué en años anteriores no se necesitaban tantos procesos técnicos, para que el agua que sale por el grifo de los hogares samarios, fuera apta para el consumo humano?”
El agua es un derecho fundamental, pero en Santa Marta se ha convertido en un privilegio, porque. Por ejemplo, en los niños y en los abuelos, genera enfermedades gastrointestinales, expresa Pimienta. Por ello llama a la Secretaría de Salud Distrital, a tomar cartas en el asunto y a que atiendan las quejas que los líderes comunales manifiestan a través de este medio de comunicación comunitario.
Finalmente señaló que, “los líderes comunales trabajan por vocación de servicio, porque les nace, por amor a seguir construyendo tejidos sociales en la comunidad a la cual pertenecen; pero que los seres humanos por naturaleza somos los incomprensibles, porque por mucho que usted le sirva y que en cualquier momento y por cualquier situación deje de hacerlo usted es el peor. Así invitó a su comunidad para que participen de los procesos que se desarrollan en el barrio Olaya Herrera”.