En la ciudad dos veces Santa, cuando llueve las avenidas, calles y callejones, son un completo caos.
El registro de constantes precipitaciones ha causado traumatismos en plena temporada turística de mitad de año, provocando encharcamientos, derrumbes, rebosamientos de aguas residuales y olores nauseabundos en los puntos críticos de la ciudad.
La Mesa Técnica de Alerta por Ciclones Tropicales, conformada por el IDEAM, la DIMAR, la Fuerza Aérea AerocivilCol; han informado que el paso del huracán Beryl en Colombia llegó a su fin, aunque el protocolo de monitoreo seguirá activo para mantener informado al territorio nacional sobre el sistema.
Las autoridades ambientales recomiendan a los Consejos Territoriales continuar atentos a los comunicados oficiales del Sistema Nacional de Gestión del Riesgo de Desastres y pronósticos hidrometereológicos diarios, pues no se descartan pronósticos de lluvias asociados a otros fenómenos.
Estas lluvias potenciales no están relacionadas con el huracán Beryl.